Afrontar las crisis de manera asertiva

Ahora que afrontamos un momento global donde debemos aislarnos y ser conscientes de nuestra responsabilidad con nosotros mismos y con los demás, quisiera que reflexionaras sobre tus emociones y relaciones durante estas semanas.

¿Cuáles han sido y son tus emociones frente a la situación actual?

¿Te has dado la oportunidad de expresarlas?

¿Podrías definir el concepto de autocuidado?

¿Tienes rutinas o actividades pensadas en tu autocuidado?

¿Has enfrentado dificultades con las personas que compartes tu hogar’, lograste superarlos?

¿Podrías hacer una lista de las cosas buenas derivadas de la situación actual?

Recordemos que la resiliencia, es la capacidad que tenemos las personas para adaptarnos de manera positiva a los cambios o crisis que suceden en la vida, y que, en la mayoría de casos, significa una prueba que nos puede ayudar a ser más fuertes que antes.

Teniendo en cuenta el momento coyuntural que estamos atravesando, es muy importante volver a nuestra fuente interior para recoger de allí la energía que necesitamos hoy para florecer mañana.

Es de vital importancia que tengamos en cuenta los siguientes aspectos para afrontar las crisis de manera asertiva.

  1. Reconozcamos, vivamos y gestionemos nuestras emociones.

    Esto nos permitirá aumentar nuestra capacidad de recuperación. No tengamos miedo de reconocer nuestras emociones, es muy valioso sentirlas y hasta percibir el dolor, la rabia, el miedo, el cansancio, entre otras.

    La idea detrás de esto es vivir estas emociones sin reprimirlas.

    Cuando evadimos o ignoramos nuestras emociones nos estamos negando la posibilidad de escucharnos a nosotros mismos, de aprender de las circunstancias y nos exponemos a tener dificultades de salud, de adaptación y de manejo asertivo de las circunstancias de la vida.

    De tal manera, es recomendable buscar mecanismos para canalizar las emociones y expresarlas de la mejor manera.

  2. Tengamos esperanza

    Recordemos que la esperanza, la fe y la confianza son el comienzo de nuestra capacidad de recuperación.

  3. Establezcamos prioridades

    Es primordial satisfacer nuestras propias necesidades, que son tan básicas que a veces tendemos a olvidarlas …Alimentarnos bien , beber agua , hacer ejercicio , mantener la mente ocupada y conectarnos con nuestra esencia divina.

  4. Reactivemos nuestra paz interior

    Todos necesitamos descansar para recuperarnos de los eventos críticos, y así poder procesarlos y finalmente superarlos.

    Asegurémonos de tener una buena higiene de sueño, incorporemos periodos de descanso activo todos los días, una pequeña siesta y una meditación corta, tendrán un efecto calmante sobre nuestro cuerpo y mente.

  5. Busquemos y brindemos apoyo

    Si logramos interiorizar que hay situaciones que no podemos manejar solos y que pedir ayuda es un acto de responsabilidad y de humanidad, tendremos una ganancia inmensa para sortear las crisis.

  6. Seamos solidarios

    Ser solidarios tiene varios significados, y esto es positivo, porque quiere decir que podemos actuar en ámbitos distintos y apoyar a muchas personas de variadas maneras.

    Podemos ofrecer tiempo, compañía, escucha, hacer donaciones e incluso organizar actividades que promuevan la solidaridad comunitaria y así luchar por los derechos de los menos favorecidos.

  7. Mantengamos la unión

    Ante la adversidad, es fundamental la unión, para que todos nos convirtamos en los creadores y pioneros de nuestra nueva realidad, bajo la coherencia y la responsabilidad social.

Cree que esta coyuntura inesperada,
es la maestra desinteresada,
que te enseñará nuevas maneras
de crear una nueva realidad.

Creer para Crear